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El oficial primero Alberto Marcelo Báez Cantero, de 27 años, fue el primero en ingresar, pero fue recibido con disparos, uno de los cuales lo hirió en el abdomen.
El agente fue rescatado herido por sus camaradas, quienes por su lado se replegaron y pidieron más refuerzos.
Había sido, el contratista de obras se quitó la vida casi inmediatamente después, con otro disparo en la cabeza, pero los agentes no se dieron cuenta de ello y permanecieron parapetados por varios minutos en la entrada de la casa, además de acordonar el área.
Finalmente, los efectivos se organizaron y entraron a la vivienda, donde hallaron primero el cuerpo del feminicida.
Al alumbrar con linternas desde la calle, los uniformados notaban dos siluetas en el piso del balcón, pero solo cuando subieron hasta ahí confirmaron que eran madre e hija, ya muertas.
Sin dudas, este pasa a ser uno de los hechos más terroríficos en lo que va de este nuevo año.