Los galenos fueron acusados por mala praxis por la fiscala Norma Solís, como consecuencia de la muerte de un recién nacido en enero de 2011. La fiscalía sostiene que la madre del bebé fallecido, Nidia Bogado, esperó más de 20 horas para ser llevada a la sala de parto, pese a que fue derivada al nosocomio precisamente porque rompió la bolsa.
El tribunal de sentencia está presidido por el juez Víctor Alfieri.
