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En la mencionada unidad policial, también están recluidos miembros de la organización criminal Primer Comando Capital (PCC) y los delincuentes más renombrados del país, según informaron fuentes oficiales.
Precisamente, la alerta sobre el proyecto de rescate del criminal se dio inmediatamente después de que una comitiva judicial-policial allanara siete celdas aledañas a la que ocupa el capo narco.
Estos calabozos estaban ocupados por miembros del PCC y delincuentes paraguayos, que aparentemente responden a la órdenes de Pavão, quien supuestamente los utilizaba para comunicarse con el exterior y concretar sus negocios.
Los agentes incautaron varios teléfonos celulares durante el último cateo en la Agrupación Especializada, por ello se deduce que la información sobre el plan de rescate o fuga del narcotraficante se basa en los datos que fueron encontrados en los celulares confiscados.
Aparentemente, el sospechoso seguía manteniendo los mismos privilegios por los que ya lo habían sacado de la cárcel de Tacumbú y trasladado al cuartel de la Policía, que actualmente alberga a unos 150 reclusos.
En diciembre próximo, Pavão cumple su condena de ocho años de cárcel por lavado de dinero y asociación criminal, tras lo cual debe ser extraditado a su país, donde aparentemente le aguarda una condena de 50 años, por tráfico de drogas y delitos conexos, según explicaron.