César Romero, de la Fundación Yvy Porã, explicó que la conservación del bosque puede ser una interesante fuente de ingreso porque a partir de la Ley 3001/2006 de Valoración y retribución de los servicios ambientales, los nativos pueden lograr certificaciones y venderlas a los interesados en la Alianza Público Privada.
En el Chaco los indígenas tienen más de 1.000.000 de hectáreas, y con una política de preservación pueden acceder a más certificaciones.
Además de la fundación, trabajan con los indígenas la Comisión Nacional de Defensa de los Recursos Naturales, la Seam, la Comisión Asesora Permanente de Pueblos Indígenas del Senado y el Indi.