El imperio y Marito

Este artículo tiene 6 años de antigüedad

Los paraguayos sabemos lo pesada que puede ser la mano de Brasil mejor que nadie en el mundo. Fuimos aplastados por ella en 1870 y, desde entonces, nos tiene constreñidos.

Frente a situaciones como la que sufrimos ante Brasil desde siempre, hay dos actitudes posibles, la sumisión o la rebelión. No somos el único país que padece las pretensiones hegemónicas de un imperio y la historia está llena de ejemplos acerca de estas dos actitudes, sumisión o rebelión.

En junio de 1940 todo el establishment francés, todo completo, los partidos políticos, las Fuerzas Armadas, la Iglesia Católica, los empresarios, la prensa, todos, estaban convencidos de que lo conveniente era someterse al imperio (Reich) alemán. Todos excepto un hombre, Charles De Gaulle.

En aquellos oscuros días, todos, sin excepciones, trataron a De Gaulle de soñador, de loco, de Quijote, de subversivo, de peligroso. Pero hoy todos sabemos que ese soñador desafiante y solitario no sólo tuvo razón, sino que, por él, y sólo por él, Francia existe hoy.

Imre Nagy fue el soñador húngaro ante el imperio comunista soviético. Aunque los comunistas lo asesinaron, su sangre es el cimiento de la independencia húngara de 1989. Alexander Dubcek fue el Quijote checoeslovaco ante el mismo imperio y su Primavera de Praga fue el recuerdo sobre el que los checos y los eslovacos se sacudieron del yugo soviético.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

Nuestra situación es parecida a la de Francia en 1940. Los colorados, los militares y muchos empresarios (los maquiladores de autopartes o la Cámara Paraguayo Brasileña de Comercio, por ejemplo) creen que lo conveniente es someternos a Brasil. Piensan como el traidor francés Philipe Petain que “es lo menos dañino”.

Pedro Ferreira, el renunciado presidente de ANDE, contó ante un auditorio de la fundación DENDE, cómo actúa la mano del imperio: “Brasil también acogotó a Paraguay con amenazas y no pagando por la energía (…) Mediante jugadas administrativas, Itaipú dejó de facturarle a Eletrobras y dejó de facturarle a la ANDE. Ese es un instrumento de poder importantísimo en este país. Entonces, se ponen en vilo todos los planes que se piensan hacer, incluso en algún momento dijeron ‘vamos a dejar de pagar la cesión de energía y después vamos a dejar de pagar los royalties’; es decir, acogotas lo suficiente”.

Ferreira contó que el presidente Marito, “con la información que él tenía, las decisiones que tomó no son malas (...) Él tiene que sopesar una cantidad de cuestiones. (Pero) “en el ejercicio del poder la gente te miente, todo el mundo te miente”.

Por lo que cuenta Ferreira, Marito recibe la información que sopesa de gente que piensa que la sumisión a Brasil es lo único posible. Su entorno está integrado por entreguistas despreciables de la misma clase que Petain.

El Presidente tiene esta semana para elegir entre continuar la sumisión o emular a De Gaulle, a Nagy, a Dubcek. El pueblo paraguayo, por su parte, ya mostró estos días que no está para seguir sometido a la férula de Brasil.

evp@abc.com.py