A las inhabilitaciones impuestas a dos de sus empresas, ahora también Óscar Chamorro Lafarja sufrió sanciones a título personal por la emisión de cheques supuestamente irregulares.
El Banco Continental comunicó el jueves la lista de titulares de cuentas inhabilitadas por trasgresiones a la ley de cheques. Entre los sancionados aparece Óscar Chamorro Lafarja.
Chamorro Lafarja es hijo del exdiputado colorado José Chamorro y amigo del destituido senador liberal llanista Dionisio Amarilla.
Cheques de cuentas inhabilitadas
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Según la publicación del Banco Continental, Chamorro Lafarja fue sancionado por violentar el artículo 13 de la Ley 3711.
El señalado artículo establece sanciones para las personas que libren cheques bancarios propios o en representación de terceros contra una cuenta corriente cancelada o en talonario de cheque bancario ajeno o adulterado.
El empresario fue sancionado con una inhabilitación de tres años. Esto le impide operar o incluso abrir cuentas corrientes dentro de todo el sistema bancario durante ese período.
Sus empresas también
Antes de que Chamorro fuera sancionado, dos empresas ligadas a él también habían sufrido inhabilitaciones de sus cuentas corrientes.
La primera fue SST Security Service Technology SA, sancionada en abril pasado por problemas en una cuenta en el Banco Nacional de Fomento.
La segunda fue Bullers SA, cuya cuenta en el Banco Itaú fue inhabilitada en julio pasado.
Ambas empresas ligadas a Chamorro Lafarja fueron sancionadas con un año de inhabilitación por violaciones del artículo 10 de la Ley 3711/09.
El citado artículo sanciona con un año de inhabilitación de la cuenta bancaria a “la persona física o jurídica que, en el transcurso de un año, librara diez cheques que fueran rechazados por defecto de forma y tres cheques cuyo pago fuese negado por falta de fondos”.
Millonarios compromisos
A pesar de contar con sanciones por irregularidades, un consorcio conformado por Bullers y SST estuvo a punto de ganar una licitación de unos US$ 28 millones para proveer durante dos años servicios de seguridad y vigilancia al Instituto de Previsión Social (IPS).
Además de las irregularidades con sus cuentas bancarias, el pliego habría estado direccionado y tanto Chamorro como Amarilla formaron parte de una reunión en la que pretendían frenar publicaciones de nuestro diario para solucionar los “problemas mediáticos”.