Cuevas en su intento por defender su gestión al frente de la Cámara de Diputados y el descalabro financiero de G. 1.995 millones que el Congreso le acaba de blanquear, responsabilizó al senador Juan Darío Monges (ANR, cartista) y al concejal municipal de Ybycuí Ezequiel Cáceres (PDP) de su imputación. Monges no atendió nuestro llamado para conocer su versión.
En una entrevista en el programa “No tiene nombre” que se emite los sábados por ABC Cardinal 730 AM, el diputado responsabilizó en varias ocasiones a su rival político, Monges, de ser uno de los artífices de su “imputación política”. “Creo que hay una mano negra. Tengo sobradas documentaciones para demostrar que fue una imputación política, que no van a poder sostener y se habló que mi casa tenía hasta ascensores. Me jugaron a matar”, señaló el diputado por Paraguarí.
También dijo que su gestión como gobernador de Paraguarí fue auditada por la Contraloría y la Fiscalía y que las denuncias en su contra fueron desestimadas. Sin embargo, no mencionó que se reabrió su causa por un faltante de G. 40.000 millones en su gestión como gobernador de Paraguarí y que por eso fue imputado.
El primero de julio del año pasado, el mismo día en que Cuevas asumía como diputado y titular del cuerpo colegiado, llamativamente la fiscal Sonia Pereira a través de los medios de comunicación de la Cámara de Diputados informaba que la Contraloría no había hallado ninguna irregularidad de una supuesta malversación en la Gobernación. Al día siguiente, reiteraba por Radio Cámara que no había ninguna irregularidad como fue denunciado por Cáceres. La agente fiscal había dicho: “Resulta que se presentó una situación muy delicada, porque el Sr. Cuevas estaba por jurar y tenía una investigación en su contra; no sabía si imputarlo o desestimar la causa”, había expresado.
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La fiscala desestimó la causa el 2 de julio y el juez penal de Garantías de Paraguarí, Blas Francisco Cabriza, desestimó ese mismo día la causa, “limpiando” así la imagen del nuevo titular de la Cámara Baja.
El 27 de octubre del año pasado, el Tribunal de Apelaciones autorizó la reapertura de su causa, pero en agosto de este año, logró que su causa fuera trasladada a su feudo, en Paraguarí, donde ya había logrado inicialmente la desestimación de su causa. Cuevas presentó innumerables chicanas para trabar su proceso, donde también miembros de su familia están imputados.
Contradicción
Cuevas aseguró que cuando ingresó a la Cámara, en julio del año pasado, Diputados tenía 1.979 funcionarios y que su administración dejó 1.954 funcionarios, es decir quedaron con 25 funcionarios menos.
Sin embargo, no se explica por qué la Cámara solicita G. 1.995 millones en salarios para que funcionarios contratados puedan llegar a diciembre. Indicó que la reprogramación es normal en cada periodo.
La familia Cuevas, imputada
El 31 de julio pasado fue imputado el diputado Miguel Cuevas (ANR, Añetete) por supuesto enriquecimiento ilícito y declaración falsa. Enzo Cuevas, su hijo, quien trabajaba supuestamente “ad honorem” en la Cámara de Diputados y en la Gobernación con su padre, fue imputado por posible enriquecimiento ilícito en grado de complicidad, y Nancy Florentín, esposa del legislador, también fue imputada por supuesto cobro indebido de honorarios y uso de certificados sobre méritos y servicios de contenido falso, como docente del Ministerio de Educación.
La profesora Griselda Duarte también está imputada por supuesto cobro indebido de honorarios en calidad de cómplice.