Hasta consultorías de comunicación y cursos de capacitación “en liderazgo” fueron pagados por la Dirección Nacional de Propiedad Intelectual (Dinapi) con dinero proveniente de los fondos compensatorios por copia privada, dinero que debía ser utilizado para la promoción de los derechos intelectuales y la lucha contra la piratería.
Así lo revela un informe de la Auditoría General del Poder Ejecutivo (AGPE) que analizó el período comprendido entre 2015 y 2018, cuando Patricia Stanley era titular de la Dinapi.
Según los documentos, durante esos años la Dinapi recaudó un total de G. 75.342 millones por remuneración de copia privada. Según las disposiciones legales, el 80% de ese dinero debe ser direccionado a las Entidades de Gestión Colectiva reconocidas por la Dinapi y el restante 20% debe ser usado en promoción de los derechos de autor y lucha contra la piratería.
Según la AGPE, ese 20% del dinero nunca fue incluido en el presupuesto de la Dinapi durante ese período, sino que fue entregado en “guarda” a la AIE Paraguay, una sociedad presidida entonces por Eladio “Lalo” Villalba, para que la misma administrara los fondos con base en pedidos institucionales de la entidad pública.
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“Capacitación en liderazgo”
Los documentos revelan que la Dinapi destinó más de G. 80 millones para contratar servicios de capacitación para sus funcionarios.
Por ejemplo, en 2017 destinó G. 45 millones para una capacitación de “ejemplo en liderazgo”, encargado a María Luján Moreno.
De Dinapi a APA...
Entre 2015 y 2018, la Dinapi destinó cerca de G. 300 millones para consultorías en comunicación.
La firma ECOM SRL recibió un total de G. 48 millones; mientras que la empresa Ere Erea SA recibió cerca de G. 250 millones en ese concepto.
Todo pagado con los fondos compensatorios a través de AIE Paraguay.
Curiosamente, la firma Ere Erea SA comenzó también a prestar servicios en Autores Paraguayos Asociados (APA) desde 2019, poco después de que Patricia Stanley, extitular de Dinapi que ordenó intervención de la sociedad colectiva, pasara a ser una de las directoras en el lugar.
Según relataron fuentes de APA y Dinapi, Celsa Rossan Galeano, quien recibió unos G. 63 millones por consultorías en auditoría para la institución pública, pasó a ser jefa de Recursos Humanos de la sociedad colectiva tras la llegada de Stanley.
Las consultorías que realizó Galeano para la Dinapi también fuero pagadas con fondos compensatorios de copia privada y a solicitud de la institución pública.
La Dinapi ordenó todos esos pagos que nada tenían que ver con la naturaleza de los fondos.