Tras ser recibido ayer por el director de Política Bilateral de la Cancillería, Luis Fernando Ávalos, Ehrecke recordó que Bolivia y Paraguay tienen, en cuanto a logística y transporte, problemas similares por sus condiciones de pequeños países sin litoral marítimo en América del Sur. El empresario dijo que se necesita imperiosamente tener un sistema logístico confiable, y por ende “este tipo de iniciativas es oportuno que se ponga sobre la mesa”.
Los presidentes de Bolivia y Paraguay, Evo Morales y Horacio Cartes, firmaron el 6 de diciembre pasado, en La Paz, el comunicado conjunto que habla de “la importancia estratégica, como eje de desarrollo económico y social, que ambos países le otorgan a la hidrovía Paraguay-Paraná, y en ese sentido respaldaron los esfuerzos realizados por la industria naval de los países miembros de la hidrovía Paraguay-Paraná, importante actividad que moviliza el comercio y genera numerosas fuentes de trabajo”.
Los mandatarios “manifestaron su interés en la reactivación de Urupabol, como mecanismo de integración trilateral, a fin de profundizar la cooperación e integración energética, la libre navegabilidad en la hidrovía”.
