En una sesión a puertas cerradas, con fuerte custodia policial, y en voto secreto, 7 concejales votaron por la candidatura de González, mientras que 5 votaron a favor de Alcides Castro, actual titular de la Junta Municipal. La decisión fue recibida con protestas de los lugareños, quienes acusan a los ediles de haber “vendido” sus votos en favor de González, que con su denuncia contra el intendente Casas provocó el descalabro político y administrativo que tiene en jaque al municipio desde hace un año.
“No puedo decir que se compraron los votos”, dijo el concejal José Vallejos (ANR), uno de los cinco que se mantuvieron leales a Casas. El edil no descartó, sin embargo, que pudo haber existido “presión política y económica” a sus colegas, que hasta la semana pasada afirmaban categóricamente que no permitirían el avasallamiento a la institución, y sin embargo cambiaron radicalmente de postura.
De acuerdo a lo expresado por Vallejos, la Junta resolvió elegir un intendente debido a que se vencieron los plazos de permiso otorgado al intendente, quien guarda reclusión domiciliaria por orden judicial en la causa que se le sigue por presuntas irregularidades en el manejo de fondos.
De que esto es una persecución política nadie duda, porque hasta ahora no se ha podido probar que el intendente Víctor Casas haya cometido delito, sin embargo se le mantiene detenido sin poder ejercer sus funciones, dijo, al tiempo de reconocer la fragilidad de las instituciones democráticas. Está mal desde la misma Carta Magna. Debe haber independencia de poderes, pero los poderosos manejan la justicia a su manera en este país, dijo el concejal Vallejos.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
