Millones en obras inconclusas e inservibles en Ñeembucú

La administración del liberal Carlos Silva tuvo como característica principal, en estos cinco años, la contratación invariable de la empresa constructora BGF SA, cuya cara visible es el arquitecto Jorge Gustavo Franco, pero que, según fuentes, pertenecería al correligionario del gobernador, el diputado Dionisio Amarilla, ex alto funcionario de la Universidad Nacional y hoy electo senador.

La firma BGF SA resultó “ganadora” en al menos 10 licitaciones para construcciones, por un monto total de G. 122.416.537.444 (unos 22.257.000 de dólares), según datos que constan en la página de la Dirección de Contrataciones Públicas.

En una de las últimas licitaciones, para el pavimento “tipo ripio” de un camino del sur (que une Pilar-Boquerón- Humaitá-Curupayty y Paso de Patria), la constructora fue adjudicada en tiempo récord por la Unidad de Contrataciones de la Gobernación. La UOC integrada por Yenny Martino y César Verón realizó la apertura de sobres, estudió y adjudicó en el mismo día (el 4 de julio de 2017) la obra a BGF SA por G. 24.971.366.420.

Los parámetros establecidos por ley mencionan 20 días hábiles como mínimo y prorrogables por cuestiones técnicas por 20 días más. Por si estos privilegios fueran pocos, la constructora también ha sido beneficiada con adendas en casi todos los casos, las que incrementaron los montos en miles de millones de guaraníes. 

Solo en construcción de “caminos enripiados”, el monto total asciende a G. 77.778.343.365. En todos los casos, los trabajos previstos incluyeron obras de drenaje, instalación de alcantarillas, construcción de puentes de hormigón y, por sobre todo, la cobertura de pavimento tipo enripiado.

Sin embargo, la firma adjudicada lo que hizo fue echar sobre los caminos piedras conocidas como “destape de cantera”, que, según datos, costarían 10 veces menos que el ripio de canto rodado. El resultado: todos los caminos están en pésimas condiciones, pero se pagó el 100% de lo acordado con la firma adjudicada.

Otra de las obras adjudicadas es la construcción de un Mercado Popular a un costo de G. 22.743.512.217, en enero del 2017. La vigencia del contrato es de 18 meses, o sea, vence en julio, pero la obra apenas está en sus inicios. Pese a esto, el gobierno regional ya desembolsó G. 18.976.004.794, y no contento con eso, hizo una ampliación de contrato por un monto de G. 4.547.676.180 el 6 de febrero de este año, totalizando así G. 27.291.188.397.

Otra obra de alto costo es el Hospital Escuela, construido para la habilitación de la carrera de Medicina de la Universidad Nacional. En este caso, la obra fue adjudicada en G. 8.455.680.482, y la adenda fue de 1.690.660.336, con lo cual el costo llega a G. 10.146.340.818. La construcción ya presenta grietas.

A estos se suman casos de instalación de sistemas de agua potable y hasta edificación en un colegio subvencionado.

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