Servián dice que ambos dictámenes adolecen de graves defectos que desvirtúan por completo las funciones que por ley le competen, ocasionándole un perjuicio irreparable.
Critica que los citados no hayan tenido en cuenta ninguna de las otras pruebas arrimadas, como ser rastros de tortura, resultados médicos, ni el tiempo de persecución, apresamiento injustificado y persecuciones políticas que le impidieron trabajar.
Lamentó que el procurador lo haya amenazado con tomar medidas de responsabilidad civiles y penales sobre falsedad en juicio. El año pasado presentó recurso de reconsideración contra los dictámenes, y espera una resolución favorable.