En una parte del discurso, el canciller Loizaga en el 31er. período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos, que tiene su sede en la ciudad suiza de Ginebra, mencionó “la importancia que tuvo la adopción” del Protocolo de Asunción sobre el “Compromiso con la promoción y protección de los derechos humanos en el Mercosur”.
Este instrumento, dijo Loizaga, consagra “la vigencia de las instituciones democráticas y el respeto de los derechos humanos y de los derechos fundamentales” como parte sustancial del proceso de integración.
El “Protocolo de Asunción sobre compromiso con la promoción y protección de los derechos humanos del Mercosur” fue aprobado en 2005.
Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay ya ratificaron el documento. Su entrada en vigencia se dio el 3 de abril del 2010. Hasta el momento Venezuela, gobernado por el presidente Nicolás Maduro, no lo hace.
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La fina alusión al país caribeño fue pronunciada ante la atenta mirada del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon (coreano).
Loizaga recordó que en la última Cumbre del Mercosur realizada en diciembre del 2015 en Asunción, se reiteró la importancia de la firma del protocolo por parte de los países del bloque.
“No se calla”
Loizaga también dijo que la intención de Paraguay “ha sido contribuir con los países, las agencias del Sistema Universal y la sociedad civil, para lograr pasos positivos en el respeto, la protección y la garantía de los derechos humanos, observando con rigor el principio de la no intervención en los asuntos internos de otros Estados”.
“Sin embargo, no podemos callar cuando principios universales de derechos humanos son violados sistemáticamente”, manifestó.
El régimen de Maduro tiene en sus cárceles a 78 presos, según cifras de defensores de derechos venezolanos. Están presos, entre otros, el líder opositor Leopoldo López, condenado a 13 años y nueve meses de cárcel.
La posición del Gobierno ya generó roce diplomático con Venezuela. En enero pasado, un comunicado de la Cancillería nacional expresó su rechazo al “trato denigrante” al que han sido sometidas, en la cárcel de Ramo Verde de Caracas, Lilian Tintori y Antonieta López, esposa y madre de Leopoldo López, respectivamente.
Defienden derecho a la vida
En otro pasaje del discurso ante la Comisión de DD.HH., el canciller Eladio Loizaga dijo que el país “avanza hacia una ponderable cultura democrática, cuyas principales manifestaciones se encuentran en la libertad de expresión, así como el derecho a la vida, principio constitucional”. La ley sobre aborto en Paraguay es restrictiva y solo autoriza la interrupción del embarazo cuando la vida de la mujer o de la niña corre un grave peligro. No prevé excepciones en casos de violación, incesto o feto inviable. En su momento, expertos de la ONU denunciaron al Gobierno por no cumplir con su responsabilidad de actuar en el caso de una niña de 10 años que quedó embarazada tras ser presuntamente violada.