Valoran conquista pero piden institucionalidad

Sannemann, en entrevista con Radio ABC Cardinal 730 AM, en el programa “No tiene nombre”, dijo ayer a la mañana que existe una cultura autoritaria que se instaló en un momento histórico de la sociedad latinoamericana y que en nuestro país tiene raíces en los regímenes anteriores a Alfredo Stroessner.

Como parte de la dirigencia política, hizo un mea culpa por no haber podido construir la institucionalidad.

Indicó que estos 30 años de democracia son una oportunidad para reflexionar y pedir perdón también por lo que no hicimos. “Este no es el sistema por el cual lucharon y arriesgaron la vida y muchos perdieron (…). No supimos construir la institucionalidad de la democracia y esto es producto de una cultura de la tiranía que se impuso”.

Asimismo, destacó la relevancia de analizar con seriedad el mecanismo para reconstruir la democracia. “Este es un problema grave“, consideró. En ese sentido, citó grandes atrasos, como el poco presupuesto para educación e investigación.

Sannemann indicó que estas fechas deben ser tenidas en cuenta no solamente para recordar lo sucedido durante la dictadura stronista sino para replantearnos y poder decir a las nuevas generaciones: “Esto es lo que pasó y esto es lo que no tenemos que hacer y lo que tenemos que construir para no pasar por lo mismo otra vez”, indicó.

“Nunca construimos con las instituciones lo que teníamos que construir para que nuestros nietos vivan el día de mañana de una manera diferente”, lamentó.

Apuntó que su generación es “tristemente privilegiada” porque tuvieron la oportunidad de ver morir lentamente a los excombatientes de la Guerra del Chaco en el olvido, de dialogar con los excombatientes de la guerra civil de 1947, de vivir todo el proceso de la dictadura de Stroessner, sentir lo que es el miedo, ver la prisión y secuestro de sus padres.

Señaló que algunas veces le preguntan cómo era el miedo y que él les pregunta a su vez a los jóvenes qué sienten al pasar cerca de la policía y ellos dicen “nada”. Sannemann dijo que entonces sabe que valió la pena porque la gente desconoce lo que significa no tener libros y no hablar por miedo.