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CORONEL OVIEDO (Víctor Daniel Barrera Burgos, corresponsal). La interesante iniciativa fue presentada por el nuevo director de la penitenciaría, Ing. Agr. Quintín Álvarez, quien decidió utilizar unas tres hectáreas de los doce disponible para que reos con medidas transitorias puedan cultivar y producir maíz, mandioca y poroto.
En dos meses se están logrando grandes resultados y el objetivo es que los reclusos con mejor comportamiento aprendan los oficios de la chacra para que tengan como una opción laboral luego de cumplir con su condena.
Como incentivos, los internos son remunerados con G. 20.000 por día gracias a la ayuda económica de los colonos menonitas de J. Eulogio Estigarribia.
El director de la Penitenciaría Regional de Coronel Oviedo señaló también que el proyecto tiene como objetivo principal la reinserción social de los reclusos y que a través de la huerta de autoconsumo tengan un trabajo, distracción e incentivo económico.
Indicó que dentro del programa están 17 personas, de las cuales ocho trabajan en la chacra y el resto se encarga de la limpieza de todo el predio de la penitenciaría.
Uno de los beneficiados del proyecto, Rigoberto Sánchez (37), dijo que se encuentra hace cinco años en la penitenciaría cumpliendo una condena de nueve años por tráfico de droga. Expresó que la iniciativa es muy útil para los internos porque representa un pasatiempo y evita que se piense en hacer cosas malas.
Dijo que nunca trabajó en la chacra y que ahora está aprendiendo las labores del campo. Agradeció a la dirección de la penitenciaría por llevar a cabo este tipo de iniciativa.
La sede de esta ciudad tiene capacidad para unos 900 reclusos, sin embargo, están unos 1.500 internos dentro del penal.
Esta hacinación dificulta la reinserción de los mismos a nivel social y laboral, por lo que generalmente al poco tiempo delinquen de nuevo y vuelven al penal.