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La idea de celebrar el Día Mundial del Agua nació en 1992 durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo realizada en Río de Janeiro (Brasil). El principal fin apuntó recordar la importancia de este líquido esencial.
Un informe elaborado por el Banco Mundial sobre el servicio de agua y saneamiento elaborado en el año 2020 reveló que el 50% de los acuíferos del país están contaminados y un bajo porcentaje de la ciudadanía recibe agua tratada. El documento detalló que casi el 50% de los hogares paraguayos no accede a agua para beber que cumpla con los estándares mínimos de calidad. Para sumar, el 70% de los usuarios tienen el servicio pero de prestadores informales, entre ellos, de Juntas de Saneamiento, que según el relevamiento, en un 55% ni siquiera cloran antes de largar.
Ante esta situación y falta de planes de contingencia, los consumidores recurren a soluciones alternativas y más seguras, como la compra del agua de empresas embotelladoras. Estas firmas ofrecen la posibilidad de acceder a un líquido de mejor calidad y apto para el consumo.
El alto grado de polución de nuestros recursos hídricos requiere de un compromiso colectivo que involucre a los ciudadanos en general como a actores del sector público y privado. Debe implicar desde buenas prácticas llevadas a cabo en nuestra cotidianeidad hasta la aplicación de medidas estructurales conducentes a preservar y resguardar la calidad de nuestras fuentes de agua, refieren empresas que otorgan servicios de tratamiento de agua. En ese sentido, una materia pendiente aún en el país es la ampliación de la cobertura del alcantarillado sanitario. El Banco Mundial señalaba en su análisis que solo el 14% de la población urbana tiene acceso a este servicio. Este hecho incide en gran medida en la actual contaminación de los acuíferos, cuya recuperación es más compleja.
El agua, considerado un “oro azul” se ha convertido en un recurso muy preciado. “Hay lugares en los que un barril de agua cuesta más que un barril de petróleo”, enfatizan firmas locales. Mientras que publicaciones internacionales refieren que miles de millones de personas se quedarán sin acceso a servicios de agua potable, saneamiento e higiene antes de 2030 a menos que el progreso se multiplique por cuatro, advierten la OMS y Unicef. Según indica el Programa Naciones de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), más de 1.100 millones de personas en el mundo carecen agua potable y 31 países padecen escasez de ella y dos de cada cinco personas no cuentan con instalaciones aptas de saneamiento.
El dato
El cuidado del agua debe implicar desde buenas prácticas llevadas a cabo en nuestra cotidianeidad hasta la aplicación de medidas estructurales conducentes a preservar y resguardar la calidad de sus fuentes. Este líquido se ha convertido en un recurso muy preciado. Hay lugares en los que un barril de agua cuesta más que un barril de petróleo.