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SAN JUAN BAUTISTA, Dpto. de Misiones (Rafael Marcial Montiel, corresponsal). El prelado sostuvo que los entendidos en la materia en obras viales tienen que planificar las construcciones de rutas y puentes con miras al futuro.
“El fenómeno natural es repetitivo, casi cada año; se tienen que planificar mejor las obras viales con miras a prevenir los desastres naturales”, dijo el obispo Collar Noguera.
Añadió que las vías como rutas y puentes son importantes para el desarrollo agrícola, ganadero y las industrias. También para la salud, higiene, la alimentación. Como obispo hizo una reflexión sobre la necesidad de que las autoridades departamentales y nacionales, cuando planifican sus obras, tengan en cuenta los fenómenos naturales y sobre todo los cambios climáticos.
El obispo valoró el esfuerzo y la ayuda solidaria a los damnificados de Misiones y Ñeembucú. Sin embargo, la población pide obras viales, puentes, caminos de todo tiempo, dijo. Agregó que se tienen que tener en cuenta el fenómeno natural, la crecida de los ríos, los humedales y las frecuentes lluvias y temporales para planificar una obra vial.
“Como cristianos debemos tener la esperanza y mirar el futuro teniendo en cuenta los efectos de la naturaleza”, dijo el obispo de la diócesis local.
El camino de tierra conocido como ruta Aguaray es uno de los tramos utilizados por arroceros, camioneros y ganaderos, pero durante la creciente es una de las rutas que se encuentran en pésimas condiciones. Esta vía sale de San Juan Bautista, Misiones, cruza el arroyo y empalma con la Ruta 4, San Ignacio-Pilar, en el cruce Ybyraty. Es una ruta muy difícil de transitar en épocas de lluvia e inundaciones.