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Las personas comúnmente asocian las complicaciones respiratorias con el cambio violento de una temperatura a otra, como pasar gran parte del día bajo la influencia de un ambiente artificial controlado por el acondicionador de aire y posteriormente exponerse a las altas temperaturas del ambiente natural.
Según explicó el Dr. Raúl Ramírez Nizza, presidente de la Sociedad Paraguaya de Medicina Familiar, las infecciones respiratorias no surgen a causa de los cambios bruscos de temperatura, ya sea de ambiente natural o artificial, sino que tales infecciones son una amenaza permanente y se producen a causa de las bajas defensas del organismo.
“Cuando existe un cambio brusco de temperatura, el cuerpo sufre de un estrés que provoca el descenso de las defensas, y a partir de ahí empieza una cascada de eventos, que si esa persona se contagia con un virus, ese virus va a tener más fuerza para poder desarrollar la enfermedad en menos tiempo y va a ser más agresiva”, explicó el Dr. Ramírez Nizza.
Una vez que el cuerpo tiene un déficit en sus defensas, se crea el ambiente perfecto que eleva las probabilidades de contraer alguna infección, que puede darse en el caso de tener contacto con una persona que sea portadora, pero el cambio de temperatura en sí no es lo que causa los cuadros respiratorios, expuso el galeno.
Según el Dr. Ramírez Nizza, es difícil precisar una temperatura “ideal” a la cual podría mantenerse el acondicionador de aire para evitar el estrés que causa la pérdida de defensas del organismo, ya que depende mucho de la sensación térmica del ambiente y de lo que cada persona sienta como agradable.
Con el fin de prevenir el contagio de cuadros respiratorios por las bajas defensas, el especialista recomienda las siguientes medidas:
- Mantener descansado el cuerpo, durmiendo las horas necesarias (un promedio de 7 horas)
- Ingerir abundante líquido, entre jugos naturales y agua.
- Consumir frutas y verduras.
“También se recomienda estar preparado frente a los cambios climáticos (naturales). Gracias a Dios, nosotros hoy podemos contar con mucha información previa a los cambios climáticos. Tenemos que ir preparados, tener un paraguas a mano, o eventualmente una ropa más abrigada para estos cambios de clima, sobre todo cuando los vaticinamos”, sostiene el doctor.
En cuanto a las personas que trabajan en lugares cerrados con acondicionadores de aire la mayor parte de la jornada laboral, el Dr. Ramírez manifiesta que “es mejor estar mejor abrigados y sudar un poco que estar menos abrigados, y lentamente luego uno va a ir adaptándose a ese clima”.
Una tercera medida - explica el especialista en medicina familiar- es evitar los contagios, a través del frecuente lavado de manos y el uso de tapabocas. “Cuidarse es también cuidar a los que nos rodean”, concluyó.