Velvet Trap: así fue el festival de la generación sin prejuicios

Gente que está empezando a crecer en el mundo, a disfrutar, a explorar la diversión desde la música es ese público. En ese sentido, estas propuestas sirven para desatar la alegría y la energía, pues están muy atravesadas por la fuerte mezcla de elementos como sintetizadores, frecuencias de sonido graves, distorsión y el autotune como figura principal, que permiten a la gente zambullirse en espirales sonoras dejando afuera cualquier preocupación.

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El festival empezó puntualmente a las 19:00 con la joven cantante 4lly, quien en una mezcla de ternura y contundencia se plantó en el escenario para defender sus propias canciones con su voz llena de alma y dulzura.

Entre tema y tema, como “Deudas”, “Perfume”, “tamagochi”, y otros, convocó a invitados como Missmaella, Yung Lucy, Tam blk, YungCxrd y Rux, algo que marcaría también el resto de las presentaciones de sus compatriotas, dejando en claro el sentido de camaradería que esta movida pregona, no competir sino colaborar para crecer.

“Espero que puedan apreciar más el arte de Paraguay”, expresó 4lly mientras el público la aplaudía con mucho respeto. La joven canta en un tema “Para abrir las puertas soy la mejor aprendiz”, envuelta en un aura de frágil sensualidad. Definitivamente una voz para tener en cuenta, que canta sobre luchar sin tener miedo y abrazar los sueños.

Entre cada cambio de artistas, la gente saltaba, cantaba y bailaba incluso lo que sonaba en la espera. Este marco recibió luego a la cantante y rapera Aleshit, quien entró saltando, con toda su fuerza y una pisada impetuosa, dominando las rimas con suma autenticidad.

Puros temas originales como “Gata de negro”, “Bby mírame”, “Voces”, y más, fueron también los interpretados por ella, quien con comodidad aborda un abanico variado entre el pop, el trap, el rap, pasando de un estilo a otro sin dificultad, sobre una lírica honesta sobre la vida. También invitó a colegas como Alvso y Elías Glz, muy aplaudidos por el público.

La irreverencia del enigmático Drxpdead llegó luego al escenario, quien trajo con él a varios representantes del sello independiente que fundó junto a otros colegas, llamado Bad Vibes Records. Otra declaración de crecimiento en comunidad.

Ese trap más oscuro y descarnado caracterizó a este tramo del festival, donde también actuaron más invitados como Gio Gg, Saintz, Zalde, Lil Papper y Yung Lucy. El delirio en escena era total y estos chicos estaban haciendo de este el momento de su vida, con temas propios, introspectivos, sombríos y delirantes que miran hacia adentro de las mentes de los jóvenes, como “Make it klap”, “Twin 6locks”, “Sasori”, entre otros.

En esta misma línea, pero más intenso, visceral y hasta rozando un abordaje metalero llegó Yung Lucy, quien también viene creciendo a ritmo de sus creaciones en colaboración con otros artistas a quienes invitó, como Kokki, Friggi, Drxpdead, Zalde, Maxraro, Milk Shake, Ana Celina, Thbrii, Zen7u y Saintz, quienes protagonizaron un desfile de ritmo.

Su cóctel es explosivo y digno de hacer a uno mover el cuerpo para sacar afuera todo lo malo. Tampoco su propuesta conoce de límites pues si bien el trap es la columna vertebral, sabe pasearse por la electrónica hasta el reggaetón, con temas como “Opio”, “Miti miti”, “Araña”, y más, indagando en sentimientos como la tristeza, la frustración pero también el amor.

El rap sofisticado de Missmaella coronó el fin de las presentaciones de los artistas nacionales, quienes entendieron que este era su momento y se lucieron.

La rapera, quien lleva ya varios años de carrera, llegó con los músicos Marcelo Soler (batería) y Chino Corvalán (bajo) para entregar una seguidilla de temas originales como “Oh bae”, “Toma” o “Bienvenidos al circo”, donde la artista canta a la sociedad hipócrita, a la clase política corrupta y llama al despertar de la consciencia. También llamó en escena a Tam blk, Majo Maciel y a las Kuña Street, para hacer temas en colaboración.

Locura internacional

Cerca de las 22:30 la gente ya estaba ansiosa, habiendo disfrutado de las anteriores presentaciones. Era hora de que llegue uno de los primeros platos internacionales de la noche. Así fue el turno de Bhavi, un trapero belga-argentino quien con todo su desparpajo y diversión arremetió para llevarse el cariño de todos.

“Fantástico”, “Piso”, “Zigzag”, “Bésame” y muchos otros temas llenaron un set potente de más de una hora de este artista que irradia una personalidad cirquera y hasta caricaturesca, con un cuerpo que se desdobla en cada canción, haciéndose palpable en él esa energía que caracteriza a sus obras del trap más puro con pizcas de condimentos electrónicos.

“¡Nuestra primera cita mis amores. Que sea una noche inolvidable!”, exclamó ante la multitud, a quienes también explicó que si venimos a shows es “para ser libres”. Muy comunicativo, dejó también un mensaje sobre nutrirse de buenas personas. “Si alguien te hace dudar, alejate de esa persona. Quedate con alguien que te empodere”, dijo, para recibir una ovación que aprobaba su discurso.

Tras su despedida, se hacía inminente la llegada del más esperado de la noche, el rapero argentino YSY A, uno de los nombres que supo posicionarse en su país a costa de esfuerzo. El joven artista fue el iniciador del importante concurso de batallas de rap El Quinto Escalón, que no solo le dio un espacio de expresión sino que catapultó a más nombres hoy destacados como Trueno, Duki, Lit Killah, WOS y muchos otros.

Alrededor de la medianoche subió al escenario YSY A, recibido por los gritos y los aplausos de miles de personas, muchas con remeras alusivas al artista. La emoción flotaba por los aires a medida que él arremetía con una obra versátil que zarpa desde la orilla del rap para bucear por otros estilos.

“¡Buenas noches, Paraguay mi amor! Dios nos permita tener una noche increíble. Estar acá por primera vez es algo totalmente invaluable”, manifestó al saludar y agradecer a todos por su presencia.

“Cuánto vale hacer el amor?”, “Cuántos términos?”, “A por todo”, “Tamo loco”, “Pastel con Nutella”, fueron algunos de los muchos temas que hizo, incluso invitando a Bhavi para “De casa en casa”, cumpliendo con todo lo que su público esperaba. En su propuesta hay mucho de sus influencias, como incluso una impronta tanguera.

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La noche la cerró, por todo lo alto, el DJ, productor y también compositor Basstian, poniendo a bailar a un público que no parecía para nada cansado, pues la motivación principal de estos jóvenes es transpirar una energía que en ellos parece renovarse constantemente.

“Por los míos”, con Nato, o “Ella baila” fueron algunas canciones originales que sonaron, sumándose a la defensa de las creaciones propias.

Así culminó un festival de sangre nueva, donde también se destacó un público respetuoso y celebrante de los artistas nacionales. Se respiran aires de tolerancia y empatía de esta nueva generación, de la que todos podemos aprender.