Sabina destaca la pasión, el calor y la fidelidad del público argentino

BUENOS AIRES. El cantautor español Joaquín Sabina aseguró que el público de Argentina, donde se encuentra con su gira “Lo niego todo”, es “caliente” y “muy apasionado” y destacó que aunque cuesta conquistarlos al principio, luego se vuelven “muy fieles”.

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En una rueda de prensa en Buenos Aires, donde ofrecerá 11 de los 18 conciertos que tiene programados en Argentina, hizo hincapié en el fuerte vínculo que tiene con el país y dijo que “está siempre” en sus canciones, explícita o implícitamente, porque, entre otras cosas, el tango es “la primera y mejor” música urbana, que es la que a él le gusta hacer.

“Yo sé que Argentina y Buenos Aires dan unas vueltas tremendas y que todo cambia mucho, pero para mí siempre es igual: la estética porteña es la del tango, la del rock and roll, la del barrio, la de (Jorge Luis) Borges”, apuntó antes de señalar que llegó a tener “planes serios” de comprarse un apartamento en la ciudad, aunque finalmente se truncaron.

El músico afirmó que siempre se siente arropado en el país porque el público es “caliente” y “muy apasionado”, más que el español y que, incluso, el del resto de países de la región.

“Cuando me dicen en Madrid: 'vos sos argentino', que me lo dicen mucho como un piropo, yo me lo tomo en serio” porque esa “poesía del barrio” que se hace en el país “me identifica mucho”, apuntó.

Al ser consultado por si tiene algún tipo de ritual cuando llega a la ciudad, reveló entre risas que, “como buen argentino”, realiza siempre el mismo: “la pizza, la carne y las minas (chicas)”.

Asimismo, hizo referencia a la situación política actual del país austral y vio necesario romper esa llamada “grieta” (fuerte división ideológica) para que los “enemigos” políticos pasen a ser sólo “adversarios”.

Por otro lado, admitió que en las últimas ocasiones en las que ha hecho un disco nuevo, al principio siempre pensaba que no iba a tener la energía y las ganas para sacarlo adelante y confesó que antes de grabar Lo niego todo estaba un poco aburrido del estudio.

En esa línea, avanzó que probablemente saque alguno más y confesó que, en unos años, dejará los grandes escenarios por los teatros más pequeños, donde pueda tocar en acústico y fomentar una relación con el público “menos tribal, más humana”.

El cantautor afirmó que en su disco está muy presente el paso del tiempo porque no sabe escribir sin hablar de lo que realmente le “preocupa” y, a sus 68 años, “naturalmente” lo que más le angustia es “envejecer”.

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