El procedimiento en cuestión se realizó el pasado 7 de abril en una vivienda perteneciente a Wilson Enciso Ayala, localizada en Lomas Valentinas de Ñacunday, donde la comitiva policial-fiscal llegó en busca de Mariano Enciso, quien cuenta con una orden de captura en Argentina por tráfico de drogas.
El operativo fue ejecutado por policías del Departamento de Investigación de Delitos-Filial Santa Rita, del Comando Tripartito y del Grupo Especial de Operaciones (GEO), bajo dirección de la fiscala María del Carmen Meza.
La comitiva no encontró al hombre buscado, pero incautó varias evidencias de la casa. Sin embargo, algunos objetos de valor presuntamente fueron robados por los policías, ya que no figuran en el acta del procedimiento, según una denuncia presentada en la subcomisaría 38ª de Lomas Valentinas.
Los jóvenes Fernando Enciso Ayala (21) y Santiago Ramón Cáceres López (19) dijeron que unos 20 policías ingresaron a la vivienda y sin mediar palabras los agredieron. Los agentes también golpearon a un menor de edad, quien sufrió una herida en la cabeza y fue socorrido en un centro asistencial de la zona, al igual que Corazón Zacarías, que a su vez tuvo un corte en el sector de la oreja.
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Los denunciantes igualmente informaron que los agentes llevaron una billetera que contenía G. 1.900.000 (de Mariano Enciso), un rifle Marlin 22 documentado (a nombre de Fabio Valdez González) y joyas varias (de Fernando Enciso) sin consignarlos en el acta del procedimiento.
Este jueves, los accionantes presentaron la denuncia en la Fiscalía zonal de Iruña, según informó su abogada Dahiana Sosa.
El subcomisario Fernando Ruiz Díaz, del Comando Tripartito, dijo que la referida oficina acompañó el procedimiento para coadyvar en la eventual identificación del prófugo de la justicia argentina. Calificó como falsa la denuncia de tortura y afirmó que los demorados solo habían quedado con suciedad a raíz del procedimiento. Añadió que con la acusación solo se pretende desmeritar la actuación policial.
Intentamos comunicarnos con la fiscala Meza, pero no obtuvimos retorno. No obstante, nuestra redacción está abierta para escuchar su versión.
