El agente soporta cargos por abuso sexual en niños, coacción sexual y violación e incesto; y se encuentra recluido en la Dirección de Policía, a disposición de la Fiscalía.
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Según el acta de imputación, el hombre habría cometido las agresiones sexuales de manera sistemática entre el 1 de mayo del 2016 y el 31 de julio de 2021. Los abusos comenzaron en la zona de Paraguarí y luego en la región de Alto Paraná.
Los abusos inicialmente fueron con manoseos cuando la menor tenía 10 años (actualmente cuenta con 16 años). Además, se presume que entre junio y julio de este 2021, el presunto agresor habría suministrado medicamentos a la menor para hacerla desvanecer y aprovechó esa situación para someterla sexualmente, de acuerdo a la imputación fiscal.
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Denuncia por Fono Ayuda
Cansada de estos vejámenes, la adolescente decidió denunciar el caso al sistema FONO AYUDA 147 el lunes 15 de noviembre y los antecedentes fueron remitidos al Ministerio Público.
La investigación quedó a cargo de la fiscala Coronel, quien dispuso que la menor sea inspeccionada por un médico forense. En la inspección médica se confirmaron los abusos y la víctima recibió contención psicológica de parte de una profesional del Centro de Atención a Víctimas.
En la víspera, una comitiva fiscal-policial allanó el recinto donde se encontraba el uniformado y procedió a su detención.
Prisión preventiva
La fiscala Coronel solicitó al juzgado que se convierta la detención en prisión preventiva, al considerar la gravedad de los hechos investigados y la alta expectativa de pena carcelaria.
El nombre completo del imputado y otros detalles del caso se mantienen en reserva, de conformidad a lo establecido en el Artículo 29 del Código de la Niñez y Adolescencia, que señala lo siguiente: “Queda prohibido publicar por la prensa escrita, radial, televisiva o por cualquier otro medio de comunicación, los nombres, las fotografías o los datos que posibiliten identificar al niño o adolescente, víctima o supuesto autor de hechos punibles”.