Los comerciantes de diversas ciudades de frontera del país vienen apoyando un proyecto de ley de competitividad fronteriza que plantea incentivos impositivos para las mercaderías que se importan con la finalidad de vender a extranjeros.
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El proyecto tiene una fuerte resistencia de parte representantes de gremios del rubro de supermercados e importadoras que se oponen al proyecto de ley que se estudia en el Senado. Estos últimos temen que no haya condiciones de efectuar controles para evitar el contrabando y las evasiones en la comercialización de mercaderías ingresadas al país bajo el régimen que proponen.
“Los argumentos de ellos son manipulaciones de la opinión pública porque si nos remitimos a los números y lo que refleja nuestra actividad es diferente. Dicen que emplea a extranjeros pero los que están trabajando en el centro son paraguayos”, expresó Juan Ramírez de la Cámara de Comercios y Servicios.
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El secretario general del citado gremio, Ivan Airaldi añadió que la resistencia radicaría en que con este régimen deben pagar los impuestos en el momento de hacer el despacho de las mercaderías para su comercialización en el país un 10% en contrapartida están pagando solo el 1%.
Trazabilidad
En tanto la senadora Georgia Arrúa (PPQ) pidió a los detractores a argumentar sus cuestionamientos. “Necesitamos crear nuevos sistemas para mover la economía de Paraguay y este proyecto va favorecer a todas las pequeñas ciudades. Plantea trazabilidad, mediante facturas electrónicas, transparencia, competitividad y otras ventajas. Acá ninguno pudo explicar con argumento porque esto es inconstitucional”, expresó.
Dijo además que no existe una dualidad tributaria sino un régimen especial como muchas ya existente como maquila, autopartes, entre otros. Sobre la posibilidad de que las resistencias influyan en la decisión del Senado dijo que si se analiza con objetividad nadie podría oponerse.