Los enfrentamientos entre las tribus árabes de Kinana y Hawazma se desencadenaron el pasado fin de semana en la localidad de Abu Jubeiha y se saldaron con seis muertos y 19 heridos.
Según dijo a Efe el gobernador en funciones de Abu Jubeiha, Simon Tap Mian, las autoridades impusieron un toque de queda de las 8.00 de la noche a las 5.00 dentro de las medidas para contener la situación en esa ciudad.
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Sin embargo los enfrentamientos tribales se reanudaron en la noche del martes tras la llegada a la ciudad de hombres armados de otras tribus desde aldeas cercanas a Abu Jubeiha, por lo que la cifra de víctimas ascendió a 20 muertos y 41 heridos, al menos 16 de ellos graves.
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Mian afirmó que las fuerzas regulares intentan separar a las partes beligerantes y evitar que los enfrentamientos lleguen a otras áreas de la ciudad, mientras que una fuerza militar se dirige a Abu Jubeiha para intentar controlar la situación.
El nuevo brote de la violencia en Kordofán del Sur provocó la reacción del enviado especial de la ONU para Sudán, Volker Perthes, quien se mostró en Twitter “profundamente preocupado por los choques inter-comunales en Abu Jubeiha (...) que resultaron en la desafortunada pérdida de vidas”.
Sudán sufre de enquistados conflictos entre las múltiples tribus del país, particularmente en el centro y el sur, que provocan esporádicamente estallidos de violencia en distintos puntos con pérdidas humanas y materiales y que contribuyen a la inestabilidad en el país.