El cuerpo de la víctima, Jennifer Michelle Maldonado Padua, de 33 años, fue hallado con heridas punzantes en un risco, situado a orillas de un río en Utuado y próximo a la carretera PR-123, según el comunicado de la Policía.
Maldonado Padua trabajaba como guardia de seguridad en la Planta Central Hidroeléctrica en el lago Dos Bocas de Arecibo junto al sospechoso, Anthony Salvá Rivera, de 26 años.
Durante los interrogatorios, el sospechoso dijo a los agentes que la mujer había desaparecido luego de montarse en un vehículo, minutos antes de iniciar su jornada de trabajo.
De la investigación fue surgiendo que la información ofrecida por el sujeto no coincidía con la evidencia recopilada por los agentes, lo que finalmente desencadenó que los investigadores sospecharan de él.
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Tras corroborar videos y coartadas y entrevistar a diferentes personas, la Policía logró que Salvá Rivera admitiera ser el responsable de la desaparición y muerte de la mujer y pudo encontrar su cuerpo.
Este caso sería el segundo feminicidio cometido en menos de 24 horas en la isla, que cuenta con poco más de 3 millones de habitantes, y el décimo en lo que va de año.
Ayer por la noche, una mujer de 48 años fue asesinada por su expareja en una urbanización de Bayamón, municipio vecino a San Juan.
La víctima, identificada como Vanessa Cardona Soto, presentaba una herida de bala que le ocasionó la muerte, mientras que su expareja intentó quitarse la vida con un disparo.
El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, extendió recientemente por un año el estado de emergencia por violencia de género en la isla.
