"Algunos terroristas de las ADF a los que hemos estado rastreando desde el ataque contra los turistas finalmente fueron capturados y también matamos a varios de ellos este miércoles por la noche en el lago Eduardo", declaró a EFE por teléfono el portavoz adjunto del Ejército ugandés, coronel Deo Akiiki.
Según Akiiki, los marines de las Fuerzas Armadas ugandesas y las fuerzas especiales del Ejército se unieron en una "operación nocturna bien coordinada", cerca de la vecina República Democrática del Congo (RDC), donde el grupo rebelde, que tiene lazos difusos con la organización yihadista Estado Islámico (EI), posee sus bases.
Así, consiguieron capturar a un "comandante intermedio" de las ADF, conocido como Njovu ("elefante" en luganda, suajili y otros idiomas que se hablan en esta región), al que acusan de dirigir el ataque contra los turistas en el cercano Parque Nacional de la Reina Isabel.
"Matamos a cuatro de sus compañeros y otros dos se ahogaron en el lago Eduardo", añadió el portavoz, que indicó que las operaciones militares siguen en curso para "acabar" con todos los rebeldes que podrían permanecer en Uganda.
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En el escondite de las ADF también encontraron objetos que pertenecían a los dos turistas asesinados el pasado octubre, de nacionalidad británica y sudafricana, y el carnet de identidad de su guía de safaris ugandés, aseguró Akiiki.
El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, prometió el pasado 18 de octubre que su país encontraría a los "terroristas" que interceptaron el vehículo de esos turistas en uno de los espacios naturales más visitados de Uganda, lo incendiaron y mataron a sus ocupantes.
No es la primera vez que Uganda se pone en guardia por la amenaza terrorista.
En noviembre de 2021 hubo varios atentados en el país, con terroristas suicidas que estallaron bombas en el centro de la capital, Kampala, en un bar popular y en el interior de un autobús, lo que dejó al menos ocho muertos (incluidos los atacantes).
Las autoridades achacaron también esos ataques a las ADF, radicadas en la vecina RDC, donde a menudo realizan incursiones en contra de civiles.
La incursión más grave de este grupo rebelde en territorio ugandés ocurrió el pasado junio, cuando los insurgentes mataron al menos a 42 personas, incluyendo 37 estudiantes, en una escuela del distrito de Kasese (oeste), cerca de la frontera congoleña.
Aunque los expertos del Consejo de Seguridad de la ONU no han hallado pruebas de un apoyo directo a las ADF del Estado Islámico, que en ocasiones reivindica sus ataques, Estados Unidos las identifica desde 2021 como "una organización terrorista".