En el marco de una visita del director adjunto regional para Centroamérica de la DEA, José Román, la agencia antidrogas estadounidense ratificó su apoyo al Gobierno de Costa Rica en la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico.
"Estamos trabajando en un convenio que mejorará las capacidades de investigación tanto de la DEA como el FBI en territorio costarricense. Este convenio de cooperación, único a nivel latinoamericano, reforzará las acciones operativas contra las bandas criminales transnacionales”, señaló el ministro de Seguridad, Mario Zamora Cordero, en un comunicado.
Con el objetivo de incrementar la colaboración entre las policías para atacar al narcotráfico en territorio costarricense, el ministro viajará a Washington en los próximos días para trabajar en un convenio de cooperación con la DEA y el FBI.
"Fue un honor conversar sobre los temas que nos unen y la DEA continuará apoyando al gobierno de Costa Rica y a todas sus instituciones de la ley y el orden. Estamos con el mejor apoyo para ser más efectivos, trabajar en conjunto y tener un mejor efecto contra los criminales que afectan a Costa Rica”, afirmó Román.
Como parte de sus esfuerzos para combatir el narcotráfico, la policía costarricense también recibirá más capacitación en operaciones con las autoridades europeas por medio de la Agencia de la Unión Europea para la Cooperación Policial o Europol, y software de nueva generación para el intercambio de información en tiempo real.
Según las autoridades el objetivo es contar con más herramientas tecnológicas para identificar y atrapar a los grupos criminales.
En los últimos años Costa Rica se ha convertido en un importante centro para el almacenamiento y exportación de cocaína a destinos como Europa y Norteamérica, según han reconocido las propias autoridades.
En julio de 2023 el Gobierno costarricense inició la 'Operación Soberanía', mediante la cual instaló escáneres y reforzó la presencia policial en la Terminal de Contenedores de Moín, con el fin de combatir la exportación de droga en cargas de productos lícitos, especialmente hacia los países europeos.
En 2024 este país registró 880 homicidios, la segunda cifra más alta de su historia, y alcanzó una tasa de 16,6 por cada 100.000 habitantes, según los datos del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), una situación que se vincula al narcotráfico.
En 2023, Costa Rica sufrió la mayor cantidad de homicidios de su historia con 905, lo que representó un aumento del 38 % en comparación con 2022.
Al 11 de marzo del 2025 las autoridades contabilizaron 181 homicidios, uno más que en el mismo periodo de 2024.