El ministro saudí de Hach y Umrah, Tawfiq bin Fawzan Al Rabiah, dijo en declaraciones a la agencia oficial de noticias SPA que las altas temperaturas "exigen asegurar que los peregrinos permanezcan dentro de sus tiendas desde las 10 de la mañana hasta las 4 de la tarde", y así "preservar su salud y prevenir el estrés térmico".
El responsable hizo esta recomendación especialmente para el día en el que los fieles suben al Monte Arafat, a las afueras de La Meca y el punto cumbre de esta peregrinación, que todo musulmán debe realizar al menos una vez en la vida si su salud física y económica se lo permite.
Asimismo, advirtió contra las "caminatas grupales desordenadas", que "representan una amenaza para la fluidez del movimiento y la vida de los peregrinos", al tiempo que recomendó no ir andando a los lugares sagrados del itinerario.
"Los planes de agrupación y transporte contribuyen directamente a organizar el movimiento de multitudes y a garantizar la seguridad de todos, y su cumplimiento es una responsabilidad colectiva", indicó.
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Por otra parte, el Ministerio saudí de Sanidad indicó en un comunicado que está "altamente preparado para abordar directamente los casos de estrés térmico", y que para ello ha asignado camas equipadas en más de 34 centros de salud móviles distribuidos por la zona, a fin de brindar atención médica urgente y garantizar una respuesta rápida.
Además, SPA informó de que las autoridades saudíes lanzaron el proyecto "i-Selfie", para realizar electrocardiogramas y medir las constantes vitales utilizando la inteligencia artificial sin contacto, algo que representa "un avance en la atención preventiva y el diagnóstico inmediato".
También el Ministerio del Interior señaló en otro comunicado que los peregrinos que acudan a La Meca sin el permiso específico para realizar el "hach" serán castigados "con la deportación y la prohibición de entrar en el Reino por un periodo de 10 años".
El año pasado, alrededor de 1.300 personas murieron durante la peregrinación debido a las altas temperaturas -que llegaron a situarse en 52 grados-, de las que el 83 % eran peregrinos que accedieron al lugar sin disponer de los permisos requeridos, los transportes concertados ni las mínimas condiciones de seguridad previstas.