“La renuncia del papa Benedicto XVI no afectará al proceso de canonización de Juan Pablo II”, explicó hoy Mokrzycki, quien fue secretario del Papa polaco desde 1996 y de Jozef Ratzinger durante los primeros años de su pontificado.
Mieczyslaw Mokrzycki, actual arzobispo metropolitano de Lviv (suroeste de Ucrania), también destacó la importante labor de Benedicto XVI, quien ha profundizado en “la fe y el conocimiento religioso de la Iglesia”, con unas homilías, encíclicas y cartas que han puesto de manifiesto “el valor de las palabras en la vida cristiana”.
En cuanto al futuro pontífice, el arzobispo Mokrzycki considera que la Iglesia católica necesita “un Papa que defienda los valores cristianos que señaló Jesucristo”, que proteja a la Iglesia del liberalismo, que defienda “los Diez Mandamientos y la ley de Dios en la vida cotidiana”.
Un Papa que, por primera vez, podría ser un religioso no europeo ya que, como recuerda Mokrzycki, “la Iglesia es universal y está presente en todos los continentes”.