Amplían puesto de control migratorio en Posadas

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La habilitación las obras en el puesto migratorio se realizó el jueves.
La habilitación las obras en el puesto migratorio se realizó el jueves.Juan Roa, ABC Color

ENCARNACIÓN. Con la ampliación a 11 casetas de control migratorio para el acceso a la Argentina las autoridades de Posadas esperan superar el problema de las largas colas sobre el puente internacional que une las ciudades de Encarnación y Posadas.

“Lo más valioso que tenemos es el tiempo, y esperamos evitarnos el incordio de tener que perder largas horas haciendo cola sobre el puente”, señaló el ministro de Interior argentino, Rogelio Frigerio, durante la habilitación de los puestos de control, el jueves.

Con la incorporación de cuatro nuevas casetas suman en total 11 los puestos de control migratorio habilitados en la cabecera argentina del puente internacional “San Roque González de Santa Cruz” para el ingreso a este país. Dos de las casetas son del tipo doble, y están destinadas a los motociclistas, que en gran número circulan entre ambas fronteras.

El secretario de Estado, quien el 10 de diciembre abandona el cargo, se mostró satisfecho porque “pese a la crisis” pudieron concluir con una importante obra que hace a la integración de ambos pueblos, según dijo.

Asimismo, aseguró la cantidad necesaria de personal para cumplir con la demanda, hecho que se da particularmente durante la temporada de vacaciones, en la que al menos unas 30.000 personas cruzan a través del viaducto en días pico. La cantidad de funcionarios de Migraciones afectados a los controles en este punto fronterizo es de unos 120, distribuidos en tres turnos.

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Con esta habilitación se espera que las largas filas de vehículos y las demoras, en algunos casos, de hasta 10 y 12 horas para cruzar de un lado a otro la frontera durante los meses de diciembre y enero, en que se registra el mayor flujo de personas, sean parte de una historia de malos momentos.

Las obras inauguradas el jueves implicaron una inversión de más de 100 millones de pesos por parte del gobierno argentino. Las tareas, no obstante, fueron de mayor envergadura, e implicaron una readecuación total de las instalaciones en la cabera del puente, y la construcción de un nuevo sector, con 14 casillas de control migratorio más dependencias administrativas y de servicios, que constituye el frente de egreso de la Argentina hacia Encarnación, con una inversión global de 250 millones de pesos. Se estima en unos 10 millones de personas por año cruza esta frontera.