Varios clientes denunciaron que los bancos seguían procesando los cheques hasta después de la promulgación de la Ley de Emergencia. En ese sentido, el gerente de Análisis y Regulación dijo que los bancos sí podían procesarlos porque las cuentas podían pagarse a través de internet y de las terminales de autoservicios, a pesar de que los bancos tenían horario reducido para estos procesos.
En resumen, varios comerciantes pensaron que no se iban a procesar los cheques diferidos que se emitieron por pagos varios que hicieron —algunos ya hace meses—, lo que en sus cuentas generó una situación de sobregiro, es decir, no había suficiente dinero para efectivizar esos cheques que terminaron siendo sin fondo.
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Esta situación genera no solo multas de parte de los bancos, sino también la posibilidad de suspensión de las cuentas corrientes de los emisores.
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Jiménez explicó que los pagos para “alimentar” estas cuentas se podían seguir haciendo a pesar de las medidas anunciadas para descomprimir la presencia de personas en las sedes bancarias.
Sobre las multas, manifestó que es una cuestión inherente a los bancos y que una ley establece las sanciones sobre la cuenta corriente, por lo que eso no puede ser modificado por el BCP.
Sin embargo, el funcionario pidió a las personas afectadas que conversen primero con sus oficiales de cuenta y busquen una solución de acuerdo al caso de cada uno. En la eventual situación de que esto no prospere, indicó que el mismo BCP conversará con los bancos para tratar de llegar a un acuerdo y evitar sanciones a raíz del delicado momento financiero de varias empresas afectadas por la crisis generada por la propagación del coronavirus.