“En el mejor de los casos llegaríamos a las 570 camas de terapia intensiva en las próximas dos semanas. Siendo realistas, es el límite considerando la cantidad de terapistas”, dijo.
Según la Sociedad Paraguaya de Medicina Crítica y Cuidados Intensivos, actualmente el país cuenta apenas con 190 médicos intensivistas, que en lugar de centrar la atención en una o máximo dos camas de terapia, deben dividir esfuerzos para la atención, al mismo tiempo, de tres o incluso más pacientes internados en la Unidad de Terapia Intensiva.
En cuanto al nivel de ocupación de camas en la UTI, el viceministro de Salud mencionó que en el sector público se registra por el momento una ocupación del 90% y un 50% en los sanatorios privados. “Alto Paraná está en un 95% de ocupación de camas. En Ineram, de 45 camas 38 están ocupada y el Hospital Nacional de Itauguá tiene 46 camas ocupadas (de 52). Estamos con una ocupación total del 90%”, dijo.
Aseguró no obstante, que la dinámica y el flujo de movimiento con que se maneja el área de terapia intensiva garantiza la asistencia médica en caso de ser requerida. “Todo ciudadano que no pueda ingresar a una terapia del sistema público tendrá la posibilidad de ser atendido en el sistema privado” conforme establece el acuerdo firmado días atrás con el sector privado de la salud.
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A la fecha, el mayor número de camas de terapia intensiva en el sector público se concentra en Asunción y Central, donde se registran 348 camas de las 529 disponibles a nivel país. Le sigue Alto Paraná con 61 camas de UTI, Itapúa con 21 y Misiones con 13 camas. Departamentos como Paraguarí, Ñeembucú, Canindeyú, Presidente Hayes, Alto Paraguay y Boquerón no cuentan con camas de terapia intensiva.
Con relación a los pacientes internados a la fecha, el viceministro indicó que el sistema de salud público tenia registrados ayer 605 pacientes en sala común y 144 pacientes en terapia intensiva en todo el país.