Boquerón registró tres nuevos casos positivos ayer: dos corresponden al distrito de Filadelfia y uno al de Mariscal Estigarribia. Con este nuevo informe de la XVI Región Sanitaria, los casos positivos detectados en Boquerón suman en total 371. De estos, 209 personas (56%) ya se han recuperado y 165 (44%) siguen activos. Hasta ahora se han registrado un total de seis fallecimientos, lo que corresponde al 1,61% del total de casos detectados hasta ahora en este departamento.
De estos 371 casos positivos en Boquerón, 65 corresponden al sector indígena, lo que es menos de una quinta parte del total. En Boquerón, aproximadamente la mitad de la población la constituyen indígenas, pero en cuanto a los números oficiales de casos positivos, menos de la quinta parte hasta ahora se ha contagiado con el nuevo coronavirus. Esto, por un lado, puede significar que hay un gran número de casos aún no detectados y reportados o que las comunidades, sobre todo las rurales, experimentan de por sí un buen aislamiento.
Los 65 casos positivos en el sector indígena efectivamente corresponden casi en su totalidad a zonas urbanas, es decir a Filadelfia, donde existen tres comunidades y un barrio indígena. Aquí se han detectado hasta ahora oficialmente 52 casos, igual al 80% del total de indígenas contagiados. Es decir, la gran mayoría de los contagios con el nuevo coronavirus entre los indígenas en Boquerón se detecta en comunidades urbanas.
La comunidad urbana de Uje Lhavos de Filadelfia registra en este momento la mayoría de casos confirmados, en total 30, seguida por las comunidades urbanas Yvopey Rendá (12) y Cacique Mayeto (10). En Uje Lhavos, la Región Sanitaria inclusive cerró el jueves pasado la Unidad de Salud Familiar por 14 días “debido a que los funcionarios se encuentran en aislamiento por ser casos positivos de COVID-19”.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Los 12 restantes casos positivos del sector indígena en Boquerón aparecen en otras comunidades, como la también urbana Santa Teresita (Mariscal Estigarribia), San Agustín (Pilcomayo), Machareti (Laguna Negra) y Yalve Sanga.
Para muchos indígenas la pandemia significa la directa pérdida de sus ingresos familiares, el cumplimiento del protocolo sanitario y quedarse en casa. También se han reducido drásticamente las oportunidades de trabajo en el campo, por la persistente sequía que vive casi todo el departamento de Boquerón y el Chaco Central.