Finalmente, y luego de tres postergaciones, el juicio al colorado cartista Óscar González Daher y su hijo, Óscar Rubén González Chaves, comenzó este lunes, informó Carlos Ortega, periodista de ABC.
La acusación presentada por los fiscales Liliana Alcaraz, Francisco Cabrera y Rodrigo Estigarribia señala una inconsistencia entre los depósitos de dinero –en efectivo y en cheques– en las cuentas bancarias del exsenador y del concejal de Luque.
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Al exlegislador se lo acusa de un supuesto enriquecimiento ilícito por G. 6.000 millones, pero llamativamente a Rubén González Chaves le acusan por un monto mucho mayor, de G. 51.000 millones más unos 82.000 dólares. Según la investigación de la Fiscalía, la mayoría de las cuentas bancarias del edil colorado no figuran en su declaración jurada.
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El tribunal que juzgará el caso está compuesto por Yolanda Portillo (presidenta), Yolanda Morel y Jesús Riera.
La primera convocatoria para el juicio fue 15 de diciembre del año pasado, pero se postergó porque el exparlamentario tenía el juicio oral por el caso de los audios filtrados, en el que fue condenado a apenas dos años tras ser hallado culpable por tráfico de influencias, pero no irá a la cárcel.
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La segunda suspensión fue el lunes 4 de enero, a causa del cuadro de covid-19 del abogado Claudio Lovera, defensor de ambos acusados.
La audiencia se convocó nuevamente para el lunes 11 de enero, pero se suspendió nuevamente porque los acusados dieron positivo al covid-19. El tribunal de sentencia ordenó que sean inspeccionados por el forense Ariel Lezcano, quien informó que además del covid-19 padecían de neumonía.
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Este caso es clave para el Grupo de Acción Financiera Latinoamericana (Gafilat), que actualmente evalúa a nuestro país en la lucha antilavado de dinero. El organismo internacional no solo pidió leyes contra el lavado sino condenas. Por eso es que está atento al caso González Daher.
