En un momento de su discurso, ya casi al final de su intervención, Nicanor Duarte Frutos protagonizó un blooper, al trastrabillar y caer del escenario, pero lo superó con sentido del humor, haciendo alusión a que su reacción demostró que todavía está para grandes partidos.
A lo largo de su exposición el expresidente mencionó, sin citarlo expresamente, al líder del movimiento colorado adversario en estas elecciones generales, en las que también se elegirá presidente de la Asociación Nacional Republicana (ANR). Señal{o que “hay gente que cree que puede comprar todo”, que “el partido es un mostrador”, donde se puede comprar lealtades, adhesiones y se puede torcer la dignidad del ser humano.
“El coloradismo no es un mostrador. Los que creen que el coloradismo puede ser un mostrador donde se trafique todo, no conocen la historia de nuestra lucha”, dijo.
“El mejor gobierno en resultados”
A tiempo de calificar al gobierno de Mario Abdo Benìtez como “el mejor gobierno en resultados, en números, no en opiniones”, señaló que el desafío que se presenta es dar continuidad a ese gobierno, o la ruptura de ese proyecto político.
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El desafío es si queremos la continuidad de la conducción política del Estado, o la ruptura de un proyecto político de poder que ha demostrado en su trabajo por el desarrollo, por la educación, por la salud, por los distritos aislados que hoy están conectados, dinamizando la economía, el comercio, las relaciones humanas, señaló.
“Tienen la obligación moral de votar a Hugo Velázquez”
Si queremos la continuidad de un proyecto que va hacer del Estado un lugar de servicio a los sectores más necesitados, a los pobres y a los ricos, a los trabajadores y a los patrones, a los productores, a las maestras y maestros, a nuestros agricultores, a nuestros jóvenes en el campo y en la ciudad, si queremos la continuidad de este proyecto histórico, ustedes tienen la obligación ciudadana, la obligación cívica, inclusive moral, de votar al compañero Hugo Velázquez para presidente de la república”, expresó.
Añadió que “si no entendemos lo que está pasando en el país, vamos a volver hacia atrás”, y efectuó comparaciones entre “14 kilómetros de ruta construidos en cinco años contra casi 600″ construidos en este gobierno.
Mencionó las grandes inversiones en salud pública en Itapúa, mientras que en el gobierno anterior habían construido solo 44 unidades básicas de salud “porque con la conducción empresarial, la presidencia de la República en manos de secretarios, sin autonomía, sin capacidad de pararse por si mismos, el Estado no va a responder a las necesidades de los sectores más necesitados”, sostuvo.
No recomienda “Presidente secretario”
Agregó que “el Estado cuando tiene la conducción de un grupo económico poderoso, y encima el presidente es un secretario (en clara alusión al precandidato Santiago Peña), tiene como futuro menos hospitales, menos inversión en salud para privatizar la salud, para que los ricos puedan acceder a las operaciones costosas, a los laboratorios costosos, centros de salud debilitados, hospitales debilitados”.
“Ahora están comprando empanadas, mañana van a comprar sanatorios, y van a construir grandes sanatorios para los ricos, mientras los hospitales se van a debilitar. O no fue esa la práctica o la lógica con la que actuaron?”, inquirió.
En otra parte de su discurso, en forma jocosa se refirió a quienes tienen grandes títulos y estudiaron en el exterior, pero no conocen del sentir del pueblo, ni saben “por dónde mea la gallina (en guaraní)”, aunque advirtió que no desacredita el saber y la formación académica.
Del acto en el que se formalizó la candidatura al Senado del actual diputado Colym Soroka y la precandidatura a la gobernación de Itapúa de su ahijado político, Rogelio Benítez, participó también el presidente de la república, Mario Abdo Benítez, quien cerró con su discurso. Abdo Benítez competirá por la presidencia de la ANR con Horacio Cartes.