Ameliano golpeó una vez por tiempo
Sportivo Ameliano consiguió imponerse a Tacuary en un partido entre rivales directos por la “otra tabla”, la del promedio, una a la que ambos deben prestar atención. Y la victoria fue todavía más especial debido a que lo hizo contra el equipo del barrio vecino, ese con el que tiene una rivalidad especial.
Las cosas se comenzaron a complicar pronto para el cuadro visitante. Ameliano arrancó demostrando intenciones claras de hacer valer su condición de local en casa ajena.
Una terrible salida del arquero Carlos Servin con sus compañeros de la defensa y particularmente con el volante Alexis Coronel generó el primer golpe en contra.
Coronel estaba mal posicionado, recibió la pelota parado cerca del área grande de su equipo y sin percatarse de que a sus espaldas se acercaba el delantero Diego Barreto. El atacante robó la pelota y definió de gran manera para poner el 1-0.
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Como si el marcador adverso no fuera lo suficientemente complicado, apenas dos minutos más tarde recibiría otro golpe cuando Igor Ribeiro vería la segunda amarilla y dejaría a su equipo con uno menos con 70 minutos reglamentarios aún pendientes.
Ameliano tuvo una serie de situaciones más para ampliar el marcador, pero la mínima diferencia se mantuvo.
En la complementaria, Tacuary trató de corregir de alguna manera el planteamiento para tratar de buscar la heroica, algo que parecía más un imposible que algo posible de conseguir.
En el minuto 75, Pablo Zeballos demostró que pese al paso del tiempo sigue teniendo una pegada exquisita con la derecha. El delantero metió un centro preciso para que Alex Arce levante la cabeza en medio de varias camisetas rivales para conectar el balón y poner el 2-0.
Ameliano volvió a ganar a su vecino y consiguió su segunda victoria en el Clausura. Tacuary, por su parte, suma tres partidos sin hacer un gol y dos derrotas.