Tañarandy, majestuosa obra de arte

Con la asistencia de miles de personas y con la luna llena como telón de fondo, este año en la compañía Tañarandy de San Ignacio retornaron los tan esperados cuadros vivientes, de la mano del artista Delfín “Koki” Ruiz y su hija Macarena.

Las estatuas humanas fueron representadas por integrantes de grupos teatrales del interior del país, como el de la comunidad anfitriona, de Cordillera e Itapúa (Encarnación). Colaboraron voluntarios de Asunción.

Las obras recreadas son La Última Cena, de Leonardo Da Vinci; Descendimiento de Cristo, de Pedro Pablo Rubens; El Expolio, de El Greco, y La Conducción de Cristo al Sepulcro, de Antonio Ciseri.

Este año la procesión de la imagen de la Virgen de los Dolores fue más breve, debido a que los organizadores decidieron evitar la caminata por el trayecto empedrado del Yvága rape, iluminado por miles de candiles de apepu y antorchas. Se usó un camino de tierra de aproximadamente dos kilómetros, desde la peatonal hasta La Barraca, donde se prepararon los escenarios para los cuadros vivientes.

Otra innovación del Viernes Santo en Tañarandy fue la participación de jóvenes tamborileros que interpretaron marchas fúnebres y que posteriormente trasladaron candiles hasta el lugar donde se concentró la multitud.

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Este año la puesta en escena se llevó a cabo en el lado opuesto a la tradicional cumbre de La Barraca. El lugar donde solía haber una laguna se encuentra seco por la escasez de lluvia y ayer estuvo colmado de gente.

Fue colocada una valla protectora para evitar que los concurrentes invadan el sector de los cuadros vivientes y para que todos pudieran apreciar las obras de arte. El público aplaudió a los actores y actrices tras cada presentación.

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Grupos de estacioneros de Areguá, de San Antonio y Luque dieron el marco musical con los lastimeros cánticos y rezos característicos del Viernes Santo.

Koki Ruiz dijo que la finalidad de las obras de arte presentadas en Tañarandy es ejercitar la creatividad con la gente. “Acá todo el mundo es artista, cada ser humano es un artista y cada acción es una obra de arte”, expresó.

Añadió que le parece muy lindo que la gente en sus pueblos repita estas obras de arte, conseguir que el ejercicio creativo sea parte de las actividades en Semana Santa o en otras fechas.