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Felicita, la niña de las mandarinas, como se la conocía, fue asesinada en Yaguarón entre la noche del 31 de mayo y la madrugada del 1 de junio del 2004. Luego de ir a la escuela, había arrancado las frutas de un árbol que estaba en su casa y salió a ofrecer las mandarinas, pero nunca regresó. El asesino sigue en libertad y ni siquiera se tiene una foto de él, más que la de su documento de identidad, de cuando tenía 16 años.
La vida de Felicita Estigarribia transcurría entre la escuela y la venta de mandarinas, ya que su familia era muy humilde y ella debía ayudar a su madre a pesar de que sólo tenía 11 años.
Como todos los días, había salido a ofrecer las mandarinas casa por casa. No se sabe a ciencia cierta cómo llegó hasta el cerro Yaguarón, aunque algunos vecinos señalan que se la vio subir a una carreta, con el hombre que horas más tarde daría fin a su corta vida y a quien se lo volvería a ver en el barrio saliendo de la zona del asesinato, solo, para “desaparecer”.
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Fue encontrada al día siguiente y se comprobó que fue ultrajada y asfixiada. El país se conmocionó con aquel crimen en el año 2004, cuando la sociedad salió a las calles a pedir justicia por Felicita.
El presunto autor del hecho fue identificado como Freddy Antonio Florenciano Brítez, quien sigue prófugo hasta hoy, a pesar de que en el 2018 creyeron haberlo capturado; sin embargo, no era él.
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Día Nacional contra el abuso infantil
En el año 2015 se estableció el 31 de mayo como el Día Nacional de Lucha contra el Maltrato, el Abuso Sexual, Abuso Laboral hacia Niños y Adolescentes en Paraguay, en memoria de la niña Felicita Estigarribia.
Según datos proporcionados por el Ministerio Público, en nuestro país se registraron 3.804 casos de abuso sexual infantil durante el 2022, mientras que en el 2021 fueron atendidos un promedio de entre 7 a 8 víctimas por día.