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En todo el país unas 13.000 personas están encarceladas, distribuidas en 14 centros penitenciarios para mayores y cinco para menores, gran parte de estas cárceles están al tope de su capacidad, solo en Tacumbú salieron 1.000 presos en libertad, pero el ingreso ha sido mayor.
La situación más preocupante se tiene actualmente en el penal femenino del Buen Pastor, que ya no puede recibir internas, por lo tanto se dispone el envío a penales del interior habilitados en Coronel Oviedo, San Pedro y Villarrica. Lo mismo ocurre en Encarnación donde se ha duplicado la población penal con relación al pasado año de 500 a 1.000 internos, señaló el funcionarios en contacto con la 780 AM.
A petición de la directora Ana Dina Coronel, la ministra de Justicia, Sheila Abed, dispuso el cierre temporal del reclusorio a través de la resolución Nº 415/15. La resolución fue dictada en atención a lo establecido en el artículo 21 de la Constitución Nacional, que establece que “las personas privadas de libertad serán recluidas en establecimientos adecuados” y en la Ley 5162/14 “Código de Ejecución Penal para la República del Paraguay”.
La capacidad del correccional es para 200 y hay 485 mujeres, casi el 50% del total de la población femenina privada de su libertad, son más de 200 mujeres hacinadas. De las 823 reclusas encarceladas en todo el Paraguay, solo 177 tienen condena, es decir, 646 cumplen prisión preventiva, la mayoría por delitos relacionados con drogas.