/arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/7SJBNBZQGZDEVD2LTQ7TLFTR3M.jpg)
Cargando...
Desde las 07:00, los indígenas de la zona de Salazar, km 340 de la Transchaco, distrito de Tte. Irala Fernández (Presidente Hayes), están otra vez cerrando la Transchaco. Los indígenas alegan que desde hace tiempo están con muchas necesidades y promesas, pero no tienen atención por parte de las autoridades.
Aparentemente, la Gobernación de Presidente Hayes anunció que se constituirá en el lugar con una delegación encabezada por el gobernador Rubén Roussillón recién a las 15:00, para escuchar los reclamos de los indígenas.
Según fuentes, el gobernador estaría esta mañana atendiendo otros asuntos y no priorizando este conflicto, que está causando muchísimos inconvenientes a los conductores de vehículos del Chaco, tanto del departamento Presidente Hayes como de Boquerón. La situación no solo afecta a los camiones con carga, sino a muchos pobladores en particular que tienen que trasladarse a la capital por compromisos laborales asumidos o familias enteras se encuentran en los vehículos yendo por ejemplo de vacaciones.
Alrededor de las 10:00, el grupo de indígenas accedió a una tregua y liberó el tránsito. Sin embargo, el conflicto persiste, por lo que no se descarta que vuelvan a bloquear la vía.
Según los indígenas, el Indi hasta ahora no aparece ni da la cara. Ellos entonces siguen esperando a que aparezca esta tarde el gobernador de Presidente Hayes para dialogar. Ayer anunciaron que si no consiguen una respuesta, el cierre podría seguir hasta poco antes de Navidad. En el lugar se encuentran apostados algunos agentes policiales y la Fiscalía, pero no están interviniendo, ya que los nativos mantienen cerrada la Transchaco en ambas direcciones, sin ningún problema.
Ayer ya cerraron la Transchaco en ambas direcciones, en este mismo lugar, primeramente durante cuatro horas y después por otras tres horas más, lo que generó una gran fila de vehículos en espera de poder pasar.
Lea más: Indígenas cierran la Transchaco
Con el cierre total de la ruta, los indígenas no ganan mucha simpatía en un sector de la población de la región, aunque muchos sí comprenden la situación y las necesidades que tienen, pero señalan que el reclamo no debe afectar a terceros.