Inmediatamente la policía contactó con las autoridades aeroportuarias y con especialistas en explosivos de la Fope, para desplegar el operativo de seguridad y verificación de las instalaciones.

También se hicieron presentes efectivos de las Fuerzas Armadas, y los cuarteles de bomberos voluntarios se pusieron en alerta, ante la amenaza.

Tras varias horas de trabajo y una detallada búsqueda, se levantó la amenaza, la cual fue calificada como falsa amenaza. “A las 22:50 se levanto la amenaza, ya que se ha verificado la totalidad del aeropuerto y no se encontró explosivo alguno”, manifestó el adminsitrador del aeropuerto, Rubén Aguilar, a radio Ñanduti.

El hecho ya se encuentra siendo investigado por la Policía Nacional y el Ministerio Público.

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