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Con un palo de madera como bastón y dos bolsos en los que trae toda su ropa, los cuales arrastró hasta la recepción de ABC Color, llegó don Tomás Benítez (55). Es no vidente, asegura que no tiene familia, sus padres ya murieron y, según su versión, su único hermano, Antonio Benítez, vendió la casa en la que vivían y se fue a España.
“Él me mintió, me dijo que se iba un rato y volvería. Había sido que ya arregló toda la venta de la casa. Mi situación es terrible, estuve tres meses en la casa de la familia Ramírez y ahora ya me dijeron que debo buscar qué comer. Gravísima es mi situación, por eso acudo a este medio”, expresó acongojado don Tomás.
Con voz melancólica y las manos temblorosas, comentó que viene de la compañía Ñuati Guasu de la ciudad de Yaguarón, departamento de Paraguarí, donde lo subieron a un autobús y así llegó hasta ABC Color con lo único que tiene: sus ropas. Don Tomás no posee nada de valor y ruega por la solidaridad de las personas o de alguna organización que pueda acogerlo.
Dijo, en comunicación con radio ABC Cardinal, que tiene una sobrina, de nombre María Luisa Vera, quien vive en Caraguatay. Busca ayuda para contactar con ella.