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Había expectativa por saber qué iban a decir o hacer, por ejemplo, los de Añetete: ¿Se animarían a defender al visitante ilustre de Achecé? Tampoco estaban en condiciones de denunciar el repudiable privilegio que disfrutó el argentino porque pueden hacerle enojar al “patrón”.
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¿Qué iban a expresar los cartistas? En los papeles previos saldrían a defenderle “con rabia” a su jefe y pedir hasta apoyo de la sala técnica para exhibir el protocolo mau que ordenaron inventar para intentar darle ropaje legal a la presencia de Macri. Varios de los integrantes de aquel clan y de otros están temerosos de que suban las sanciones penales contra los que se apoderan de fondos públicos, ¿por qué será?.
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Los liberales no tienen “vela en el entierro” en el caso Macri en esta oportunidad pero su silencio será usado en su contra. O sea, quedarán como cómplices del cartismo.
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Suponemos que algunos de los 29 liberales, divididos en cuatro bancadas, estarán indignados por la flagrante violación y discriminación que sufrimos los paraguayos. Tal vez el diputado Édgar Ortiz, el “recordman” Mineur o el acusado Carlos Portillo tengan alguna opinión.
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Y la ciudadanía espera el contundente argumento jurídico, a favor de su “único líder”, del diputado Hernán David Rivas (ANR, cartista), flamante miembro del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, quien balbuceó en una de sus intervenciones.
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Añetete sufrió otra nueva derrota política porque quedó fuera del manejo del Presupuesto 2021. El cartismo manejará los importantes números públicos, claves para la gobernabilidad.
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Marito apostó re mal a favor de A-Arnaldo Samaniego y le costó el manejo del Presupuesto, que quedó en manos del cartista Tadeo Rojas. Sospechosamente el “equipo” proenmienda mau se reunió tres años después para manejar el Presupuesto 2021, con cartistas y luguistas a la cabeza, con liberales como miembros de la comparsa. Añetete, aislado. Solo faltan los oviedistas.
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“Trato Apu’a” se fue corriendo ayer al Palacio de López. No sabemos si amenazó con saltar del barco como lo hizo el “Tano” o para ratificar su fidelidad al N° 1 para evitar que le rajen a su pareja que cobra más de G. 100 millones mensuales en una binacional.
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Espectaculares son las medidas del Ejecutivo: congelan el salario mínimo pero no los groseros beneficios y los altos sueldos que ganan los funcionarios públicos, que siguen firmes en sus puestos.