cuentito

"La cuarentena me aburría y, como soy joven, quería disfrutar de la vida. No me quedé en casa, fui a fiestas y viajé al interior".
Aunque intento conseguir ayuda, la gente minimiza mi situación; no obstante, con apoyo profesional, finalmente logré salir de este pozo de tristeza.
Teresa es conocida como la "Rubí" del barrio, ya que su inclinación ante la vanidad y el ñembo lujo la consagran como "pobre, pero de las finas".
La semana pasada, se confirmó que el presidente Mario Abdo Benítez padecía un cuadro de dengue.
Esperando no ser la próxima víctima de los asaltos, me veo obligada a buscar refugio entre rostros extraños.
La contaminación desmedida que provocan los humanos mata lentamente a la Madre tierra.
La condena ya será dictada, en minutos. Los billetes de nada me servirán porque las pruebas de intento de soborno son contundentes y el ojo de la prensa no parpadeará en estos momentos de tensión.
Se acerca una enfermera y me dice que aquel fuerte impacto que sentí fue de un accidente de tránsito y, después de ocho meses, desperté del coma.
En mi vejez, solo recuerdo con nostalgia lo que pude apreciar más.
Con unos amigos fuimos a la ciudad de Acahay para conocer un cerro del departamento de Paraguarí, pero nadie esperó que la aventura termine tan mal
Vivir en la marginalidad, entre deshechos, juntando plásticos y latitas, es el trabajo que me destina a quedar a la deriva de todos.