"Para reducir los riesgos de seguridad en el futuro tenemos que prestar todavía más atención a quién confiamos tareas importantes e informaciones confidenciales en los ámbitos relevantes para la seguridad del Estado y en las infraestructuras críticas", declaró la titular de Interior, Nancy Faeser, en un comunicado.
"A los enemigos de la Constitución no se les ha perdido nada en el servicio público. No permitiremos que nuestro Estado democrático de derecho sea saboteado desde dentro por extremistas", añadió.
El borrador prevé que se amplíen los exámenes de seguridad a los que se somete al personal de ámbitos como las comunicaciones y los servicios informáticos de las más altas instituciones del Estado o de infraestructuras críticas como el suministro eléctrico o el ferrocarril.
El objetivo es evitar posibles actos de sabotaje por parte de actores internos.
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Con este fin los servicios secretos también recurrirán de forma más intensiva al examen del rastro digital del afectado, en especial en las redes sociales, para localizar posibles actividades o declaraciones anticonstitucionales.
El Ministerio del Interior de Alemania ofrece ahora la posibilidad a estados federados y organizaciones del ramo de posicionarse al respecto y está previsto que el borrador sea presentado en otoño ante el Consejo de Ministros.