"Estamos evaluando el impacto", aseguró el aeropuerto de Schiphol en una breve actualización y aconsejó a todos los viajeros a contactar con su aerolínea antes de acudir al aeródromo, que ya es escenario de largos colas en la zona de facturación de maletas, pero también para embarcar en el avión, donde las azafatas de algunas aerolíneas están apuntado a mano los nombres de los pasajeros para permitir el embarque, según aseguraron a EFE por teléfono dos viajeros.
La compañía neerlandesa KLM ha anunciado que, de momento, "no es posible gestionar los vuelos" que tenía planeados para este viernes. "Sabemos que esto es extremadamente incómodo para nuestros clientes, especialmente considerando que es verano", subrayó en un comunicado.
Desde la aerolínea Transavia también confirmaron que el fallo informático afecta a sus vuelos, por lo que será "un día complicado", pero no tienen claro cuánto durará el problema.
El Aeropuerto de Róterdam-La Haya también tiene interrupciones en el sistema de facturación de las aerolíneas TUI y Transavia, pero no en las de otras compañías.
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El transporte público también se ha visto afectado en varios lugares del país, con numerosas provincias cancelando totalmente la circulación de autobuses porque -debido al fallo- los conductores no pueden comunicarse con el centro de emergencias en caso de problemas. Los trenes circulan con normalidad.
Un hospital en el municipio de Emmen, en la provincia de Drente, se ha visto obligado a cancelar todas las cirugías previstas para hoy, mientras que varios centros de urgencias no han recibido pacientes a lo largo de toda la mañana, aunque el fallo se ha sido solucionado en estos casos y se ha recuperado la normalidad.