La final única de la Libertadores se vivirá este sábado en Lima, aunque en principio la sede de dicho partido iba a ser Santiago de Chile. Debido al clima de inestabilidad política en este país, se decidió trasladar el partido a Perú. Domínguez declaró que avanzaron más en 11 días con los peruanos de lo que había costado más de 11 meses con los chilenos.
El paraguayo, además, comentó: “Creo que todo estaba dicho como que Lima era la ciudad donde tendríamos que haber venido desde el principio”. Estas afirmaciones cayeron pesadas en Chile, y Pérez salió al paso, según recogió el portal digital lacuarta.com.
“Las declaraciones del señor Domínguez fueron una sorpresa negativa que nos dejó un sabor amargo. No fue lo que nos dijo por videoconferencia“, arrancó señalando la ministra chilena. Luego agregó que el motivo decisivo por el cual no se jugó en Chile es porque la Conmebol le había dicho que los clubes temían por la seguridad de sus jugadores. “Lo comprendimos, aun cuando le señalamos que contábamos con todas las medidas de seguridad”, continuó.
“Cuando él señala que en 11 meses no se hizo lo de 11 días en Lima, ¿a qué se refería? ¿A que nosotros como gobierno no les aceptamos tramitar una ley corta que los eximiera de impuesto a la Conmebol y a sus patrocinadores? ¿Se refería a que en esos 11 meses no les aceptamos cerrar dos meses antes de la final de la Libertadores el Estadio Nacional y no pudieran nuestros deportistas entrenar? ¿O a que no aceptamos en esos 11 meses financiarles una fiesta por 40 millones de pesos en Castillo Hidalgo a los gerentes de la Conmebol y a sus patrocinadores?“, se preguntó Pérez.
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“Si es así, y volvieran a pedirnos esas condiciones, nuestras respuesta como gobierno sería la misma: no, señores. Los deportistas de nuestro país están primeros, y también las reglas claras en materia de ley, para todos se cumplen en nuestro país“, sentenció.