Tres puntos y tres motivos para festejar

Punta, arranque de Aquino y gol de Boselli

Esperando por lo que haga hoy Libertad en Villarrica, Cerro Porteño ganó tras una primera etapa en la que fue muy superior. Con una figura como Claudio Aquino que rinde siempre por arriba de la media y un goleador como Boselli, que se estrenó en el grito de gol y empezó a pagar la confianza e inversión.

De arranque los azulgranas quebrantaron a los de Luque con un juego bien asociado, en el que sobresalieron Arzamendia y Aquino, ambos jugando a otra velocidad respecto al resto. Boselli dispuso de un mano a mano tras gran pase de Aquino. Ruiz, que arrancó por derecha, casi clavó un golazo de chilena y hubo un momento en el que la zona cercana a Campisi aguantó un gran peloteo por parte del equipo local.

Luqueño apostó todo a Borja, que aun en inferioridad numérica tuvo varias buenas acciones. La más importante, un pase gol a Ángel Martínez tras haber dejado atrás a Muñoz, que el exvolante de Capiatá desperdició desde una clara posición.

La pregunta al finalizar la primera etapa fue hasta cuándo aguantaría Luqueño, un interrogante con vigencia ya que en la complementaria desde el inicio mismo, los de Arce mantuvieron el dominio acentuado y Boselli en buena definición le dio de derecha al travesaño, prolongando su estado de ansiedad por no llegar al gol. Hasta que el experimentado goleador salió del área, se ubicó de espaldas, construyó una gran pared con su paisano Aquino y cumplió con su rol de culminador llegando antes que Campisi y dos defensas auriazules para gritar bien fuerte la apertura que se iba a mantener hasta el final.

Un final algo confuso para Cerro, ya que de la holgura futbolística pasó a verse comprometido por los hombres de recambio que metió el DT Luis Escobar.

Primero, Rodrigo Muñoz tuvo que poner literalmente la cara para tapar un remate de Beltrán que tenía destino de gol tras un error compartido por Patiño y el Pulpito.

Segundo, González Ozuna no llegó a conectar un peligroso centro de Duré y lo último en un breve plazo de tiempo, fue una mala definición del lateral Cabrera solo frente al arquero uruguayo.

Es como que a partir de ahí, Luqueño se rindió y el final ya no tuvo dramatismo, ya que el Ciclón recuperó el control del balón y terminó el partido lejos del arco de Muñoz.

Un cierre con tres motivos para festejar, la punta, el gran arranque de temporada de Aquino y el primer gol de Boselli, lo que no es poco.

@Fedearias77