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Capainlac confirmó el fin de semana a nuestro diario que la Gobernación de Central todavía no honra su deuda con las empresas del sector, correspondiente a la provisión de leche en los últimos dos años y medio.
“Las industrias lácteas siguen a la espera de que se cumpla con la promesa de pago de las millonarias deudas por la leche entregada para la merienda escolar y que se viene arrastrando desde 2013. Si no se salda este pasivo, el riesgo de que no se entregue la leche en este 2016 continúa vigente”, advirtió la gerente del gremio, Lic. Lourdes Torres.
Según los datos, más de 180.000 niños de 1.200 instituciones educativas reciben la merienda escolar y pueden ser perjudicados por la mencionada situación. En diciembre pasado, el gobernador de Central, Blas Lanzoni, había responsabilizado al Ministerio de Hacienda, porque no realiza las transferencias correspondientes.
Al respecto, Torres señaló que “Hacienda prometió liberar los fondos y tenemos entendido que lo está haciendo; lo importante sería que la Gobernación priorizara el pago de la deuda en lo que se refiere a la alimentación de los chicos”.
La gerente de Capainlac explicó que hasta el momento la falta de pago es absorbida por las industrias, las cuales vienen abonando el precio correspondiente por la leche cruda a sus proveedores, es decir, los pequeños productores.
No obstante, la situación se torna insostenible y las millonarias deudas son una bomba de tiempo que en cualquier momento estallará, y perjudicará económicamente a cientos de trabajadores del sector primario, según lo resaltado.
El programa de alimentación en las escuelas tiene múltiples beneficios, de acuerdo con los datos, pues constituye un aporte importante a la nutrición y crea buenos hábitos alimentarios en los niños, disminuye la deserción escolar y fortalece a la lechería nacional, dando ingresos diarios a miles de familias dedicadas al quehacer lechero.
Pero la situación es mucho más complicada, porque la deuda no se tiene solo con quienes suministran el “vaso de leche”, sino también con los proveedores de almuerzo y pan. En total, el compromiso no saldado orilla los G. 30.000 millones, es decir, unos US$ 5 millones.
En los últimos días, ABC intentó comunicarse con Lanzoni, pero sus dos líneas telefónicas, con terminación 917 y 601, se encontraban apagadas.