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La Resolución N° 14, con fecha 8 de este mes, de la banca matriz establece la interrupción del cómputo del plazo de la mora para aquellas obligaciones que no se encuentren vencidas por más de 180 días al 31 de diciembre de 2017.
Esta medida dispone textualmente que “se interrumpirá el cómputo del plazo de la mora, como medida transitoria y previo estudio de cada caso en particular”, a fin de lograr “la formalización de la renovación, refinanciación o reestructuración del capital, incluyendo los intereses devengados y otros cargos hasta la fecha del nuevo acuerdo o contrato”, en este caso de “los préstamos otorgados a los sectores vinculados a las actividades agrícola y ganadera, afectados por las inundaciones, siempre y cuando esas obligaciones no se encuentren vencidas por más de 180 días al 31 de diciembre de 2017”.
El BCP argumenta que la situación climática adversa que afecta actualmente al país, ocasiona severos inconvenientes a los sectores productivos, por lo que es necesario adoptar con carácter excepcional, una medida regulatoria orientada a proveer suficiente alivio financiero a los sectores agrícola y ganadero, afectados por las inundaciones.
La medida fue solicitada por la Asociación Rural del Paraguay (ARP) para poder refinanciar los créditos de los productores afectados en las diferentes zonas del país. “La ARP gestionó ante el BCP para que las calificaciones de los deudores no pasen de las que hoy tienen, no pedimos condonación, sí refinanciación”, expresó en aquel entonces el titular del gremio, Luis Villasanti.
En ese contexto, había informado que los pequeños y medianos productores necesitaban de una urgente ayuda para refinanciar sus compromisos por la imposibilidad de vender sus animales. Los productores afectados son de Ñeembucú y Misiones, General Bruguez, Tte. Esteban Martínez, Central Chaco, Boquerón y otros.
El presidente del BCP, Carlos Fernández Valdovinos, ya había adelantado que las constantes lluvias y las inundaciones constituyen un factor de riesgo para un mayor crecimiento económico en este año, por encima del 4,2% estimado.
El problema afecta a la ganadería y la agricultura, principalmente lo que se conoce como zafriña (de soja y maíz) que está muy golpeada y los perjuicios en la producción de semillas podría afectar la próxima campaña agrícola. En julio se verá el impacto para definir nuevos porcentajes de crecimiento.